Artemisa y los sabuesos de la sabiduría Tarde de otoño en Beijing. Yazgo en una esterilla tratándome de cáncer con medicina china. Volutas de humo de artemisa merodean sobre mi abdomen hasta que, alcanzada cierta altura, se esfuman raudas hacia la ventana, contra la cual golpetea esa agua leve de Pezoa Véliz, con su bagaje […]
Platón
Dialéctica socrática y desaprender, el único temor espartano
Los espartanos, quizá los guerreros más formidables de la historia, se mofaban de las murallas de Atenas pues Esparta no las precisaba. Sus murallas, decían, eran sus guerreros, y sus fortificaciones las puntas de sus lanzas. No le temían a nada. O a una sóla cosa. En el transcurso de una magistral demostración de dialéctica […]
Risa y filosofía: Aristófanes, el canasto de Sócrates y la almohada de Platón
Platón murió con un volumen de Aristófanes, el famoso dramaturgo cómico griego contemporáneo suyo y de Sócrates, debajo de la almohada. Sorprendente, Platón muriendo así. ¿Y si se hubiera muerto de la risa? Eso es menos tirado de las mechas de lo que suena. Platón fué un filósofo (rara cosa aquella) que reía mientras filosofaba. […]
¿Será posible una educación valórica? El desaprendedor escepticismo de Sócrates
«De verdad, Sócrates, pareces haberte hundido en una gran perplejidad». «Entonces, Crito, sintiéndome naufragar, gritando a voz en cuello supliqué a los extranjeros que me rescataran del torbellino de la argumentación…» (Platón, Eutidemo, 293a) Sócrates es escéptico de que pueda haber una educación valórica. Duda de que sea posible transmitir valores de padres a hijos, […]
Eros y educación 1. Me voy por las ramas perdidas de la filosofía
Decidido a tomar en serio a nuestro Alcibíades, recién despuntando esta serie sobre el desaprender abandoné su hilo central, para «irme por las ramas». Me puse a seguirle la pista a otras instancias donde se pudiera evidenciar, simultáneamente con la de Sócrates, la muerte de alguna otra rama de la filosofía. Husmeé por aquí y […]
La muerte de Sócrates y el fin de la filosofía
Dos estropeados banquetes Algunos años atrás, en un «Banquete» de más tosca alcurnia que aquél de Platón, los comensales somos ex-compañeros de colegio, ya sesentones. Allí un «Alcibíades» tan ebrio (menos de alcohol que de sí mismo) como el original viene también a interrumpir la conversación. Pero donde la interrupción de su precursor viniera recién […]